El magnate chino vinculado a redes trumpistas, Miles Guo (también conocido como Guo Wengui), fue condenado este martes por estafar millones de dólares a sus seguidores en sus actividades contra el gobierno de Pekín. Se encontraba exiliado en Estados Unidos.
Guo fue declarado culpable de extorsión y de varios cargos de fraude de valores, fraude electrónico y blanqueo de dinero por un jurado popular del tribunal federal del sur de Manhattan.
Su persona está atravesada por lo excéntrico. Vivía en una mansión de 15.000 m2, manejaba un Lamborghini de 1 millón y poseía un yate de 37 millones. Todo obtenido a través de esquemas fraudulentos.
En este sentido, una de sus acciones más polémicas tuvo lugar en marzo de 2023, cuando anunció que haría una subasta muy particular.
El nuevo oro blanco
En febrero de 2023, Guo anunció que subastaría en la plataforma Gettr “los espermatozoides y los óvulos de nuestros compañeros luchadores” no vacunados contra el COVID-19. El evento fue programado para entre el 1 y 6 de junio de ese año.
Lo hizo basándose en la teoría conspirativa ampliamente desacreditada de que las vacunas contra el Covid-19 causan infertilidad masiva. Una narrativa “falsa”, aseguró a la AFP el editor de salud del organismo de control NewsGuard, John Gregory.
Para promocionar la subasta, Guo avaló frases de sus seguidores del estilo de que los espermatozoides de los no vacunados es “el nuevo oro blanco” o “el nuevo bitcoin”.
En aquel entonces, el magnate dijo haber almacenado cerca de 6.000 óvulos y “unos cuantos millones de espermatozoides” de partidarios no vacunados. “Subastaremos los mejores espermatozoides y óvulos, incluido, por supuesto, mi propio esperma”, completó.
En relación a la subasta, en el sitio Gettr apareció un mensaje que afirmaba que dar esperma u óvulos no vacunados no solo es una forma honorable de obtener riqueza, sino que también “salvará el futuro de la humanidad”.
Una afirmación falsa
“Los desinformadores antivacunas promovieron esa afirmación incluso frente a una gran cantidad de estudios médicos que mostraban que las vacunas no dañan la fertilidad masculina ni femenina”, dijo Gregory a la AFP.
Para confirmar que Guo llevó a cabo un plan basado en una falsa idea se puede recordar que la Organización Mundial de la Salud emitió en 2022 un informe destinado a resolver dudas relacionadas al COVID-19 y el embarazo.
El anuncio dice que las mujeres embarazadas pueden recibir la vacuna y aclara que “si no están ya vacunadas, las mujeres embarazadas deberían tener acceso a las vacunas aprobadas por la OMS en la lista de uso en emergencias, ya que, durante el embarazo, la COVID-19 las expone a un riesgo mayor de enfermar gravemente y de dar a luz a bebés prematuros”.
A la pregunta de si “¿Pueden recibir las vacunas contra la COVID-19 las mujeres que están intentando quedar embarazadas?”, la OMS responde: “Sí. Vacunarse de antemano es una manera importante de que las mujeres se protejan a sí mismas y a sus bebés frente a la COVID-19 durante el embarazo”.
Un estudio de 2021 elaborado por la Universidad de Miami (EE.UU) compartido en el sitio Acceso Covid indica que, tras haber sido evaluados los parámetros de los espermatozoides antes y después de la administración de la vacuna COVID-19 (vacunas Pfizer y Moderna), 45 hombres dieron muestras de esperma antes de recibir la primera dosis y aproximadamente 70 días después de recibir la segunda dosis.
“Tenían una mediana de edad de 28 años, no tenían problemas de fertilidad subyacentes y eran negativos para la infección o los síntomas de COVID-19. Los resultados mostraron que la concentración media de espermatozoides, el volumen de semen y la modalidad de esperma aumentaron significativamente después de la segunda dosis de la vacuna”, continúa.
Y concluye: “No hubo disminuciones significativas en el parámetro de esperma en ninguno de los hombres muestreados. Los autores señalaron que debido a que no hay virus vivo en la vacuna, era poco probable que la vacuna hubiera tenido un efecto sobre los parámetros de los espermatozoides”.